Afecciones del Oído: Problemas y Enfermedades en sus Diferentes Partes

El oído es un órgano complejo y fundamental para la audición y el equilibrio. Sin embargo, debido a su estructura y función, puede verse afectado por diversas enfermedades que impactan sus tres partes principales: el oído externo, el oído medio y el oído interno. Conocer estas afecciones ayuda a identificarlas a tiempo y buscar el tratamiento adecuado.

Enfermedades del Oído Externo

El oído externo está expuesto al ambiente, lo que lo hace susceptible a infecciones y otros problemas comunes.

• Otitis externa (oído de nadador): Esta infección ocurre cuando el canal auditivo se inflama, generalmente por la acumulación de humedad (por ejemplo, al nadar). Las bacterias u hongos proliferan en este ambiente, causando dolor, picazón y, en algunos casos, secreción.

• Acumulación excesiva de cerumen: El cerumen es natural y protege el oído, pero su exceso puede obstruir el canal auditivo, provocando molestias, pérdida temporal de audición e incluso infecciones.

• Irritaciones o lesiones: Rascarse el oído o usar objetos como hisopos puede causar pequeñas heridas, aumentando el riesgo de infección.

Enfermedades del Oído Medio

El oído medio, que incluye el tímpano y los huesecillos, es clave para la transmisión del sonido.

• Otitis media: Es una inflamación frecuente en niños, causada por bacterias o virus que llegan desde la garganta. Provoca dolor, fiebre y, en algunos casos, pérdida auditiva temporal.

• Disfunción de la trompa de Eustaquio: Esta estructura regula la presión en el oído. Si no funciona correctamente, puede acumularse líquido detrás del tímpano, generando presión, dolor o sensación de oído tapado.

Enfermedades del Oído Interno

El oído interno controla tanto la audición como el equilibrio, por lo que sus afecciones pueden ser más graves.

• Enfermedad de Ménière: Provoca episodios de vértigo intenso, zumbidos en los oídos (acúfenos), pérdida auditiva fluctuante y sensación de presión en el oído.

• Pérdida auditiva neurosensorial: Ocurre cuando las células ciliadas de la cóclea se dañan, ya sea por envejecimiento (presbiacusia), exposición a ruidos fuertes o factores genéticos.

• Laberintitis: Es la inflamación del laberinto, una estructura del oído interno, y puede causar mareos, vértigo y problemas de audición.